Periodista -por vocación- y de profesión, Alba Vila cuenta con una trayectoria destacada en el ámbito de la comunicación y el periodismo digital. Su pasión por la información y su compromiso con la verdad la han llevado a convertirse en una voz relevante dentro de los medios, especialmente en la cobertura de temas sociales y culturales.
Comenzó su trayectoria en Intereconomía TV, dónde ejerció como presentadora del programa ‘Noticias’ durante muchos años. En 2021, pasó a dirigir y presentar el programa ‘Dando Caña’ de El Toro TV. Con el corazón dividido entre Madrid y Lugo, Alba se abre por completo en este cuestionario para desvelar lo mejor y lo peor de su Madrid más personal.
1. ¿Cuándo le dan a uno el carnet de madrileño?
¿Hay carnet de madrileño?
2. ¿Qué es lo mejor de un gato? ¿Y lo peor?
Conozco muy pocos gatos de pura raza, que tengan padres y abuelos madrileños para ser considerados gatos de verdad, pero te diría que la hospitalidad. Son muy acogedores. Y lo peor, el “ej que” o el laísmo. No hay necesidad con un acento tan bonito.
3. ¿Dónde queda el ascensor para ir de Madrid al cielo?
Entre los cielos que pintó Velázquez o esas fachadas que uno se encuentra al perderse, y que tantas historias pueden contar. En cualquier calle podremos encontrar esa sensación casi mágica.
4. ¿Cuál es el último amanecer que ha visto o, en su defecto, el que no olvidará nunca?
Hoy mismo. Madrugo demasiado. Pero me quedo con aquellos en los que salir de casa para ir al trabajo avanzan un buen día, en los que la temperatura ya es, a esas horas, agradable y el abanico de los rojos y naranjas es merecedor de una foto.
5. ¿Una alcoba en el centro, o un palacio en las afueras?
Un palacio a las afueras, habiendo conocido lo que es una alcoba en el centro. Se valora más. He pasado grandes momentos en Salamanca y Ponzano, pero el estar fuera del extrarradio no lo cambio por nada.
6. Desmiéntame un tópico sobre Madrid o los madrileños.
La chulería. Diría que tienen carácter, lo vivo en casa.
7. Ahora, confírmeme otro.
Hay más de uno. Siempre tardan 10 minutos para todo. Y eso que todavía no han salido de casa. O que han salido, y te dicen que están llegando. Algo se me ha pegado de esto. También diría eso de que en Madrid, nueve meses de invierno y tres de infierno. Ah, y que el agua está muy (pero que muy) buena.
8. ¿Cuál es el mejor momento del año para degustar Madrid?
Primavera, sin lugar a dudas. Y el segundo mejor, el retorno de las vacaciones de agosto para estirar el verano durante las primeras semanas de septiembre.
9. ¿En qué rincón de la ciudad se cita con la nostalgia?
En el barrio de las Letras.
10. ¿Para qué sirve una olimpiada?
Para las oportunidades y el reconocimiento, riqueza para la anfitriona y la promoción del deporte. Por supuesto que hay retos y dificultades, pero supongo que detrás de las medallas, hay un beneficio importante tanto a corto como a largo plazo. Madrid tiene el restaurante más antiguo del mundo o una cruz más alta que la estatua de la Libertad, es también ciudad de retos, ¿por
qué no unas olimpiadas?
11. ¿Qué le enamora más… de Barcelona?
Tengo que pensarlo, … ¿La arquitectura?
12. ¿Quién es Madrid hecho carne?
Cualquiera que vaya al mismo ritmo que esta ciudad. Aquel que hubiera venido para unos días y se haya quedado toda la vida. El que se conozca dónde se sirven las mejores tapas, y que nunca te aconsejaría ir en su búsqueda en la Plaza Mayor. Aquel que todas las Navidades vaya a Sol a ver las luces maldiciendo haber decidido ir. El que se haya perdido en las barras de los bares hablando de tomarse una última que nunca llega. El camarero de toda la vida que conoce la tuya. Y así. Quien nunca se canse de Madrid es Madrid hecho carne.
13. ¿De qué piezas consta su día diez en Madrid?
Un día de sobresaliente ha de pasar, aunque no necesariamente, por levantarse a una hora razonable y desayunar unas tostadas con aceite y tomate. Un buen paseo al sol por el campo para luego, y sin prisa, tomar el aperitivo y alargar la comida con un buen tema de conversación. El 10 no se consigue si uno no está rodeado de su familia o amigos.
14. ¿Cuál es el himno no oficial de Madrid?
El himno del Real Madrid ha empezado a sonar en mi cabeza con esta pregunta, pero también los acordes de Lady Madrid o de La Puerta de Alcalá. Sin embargo, por la terriña de origen compartida, me quedaría con Xoel López y su Madrid.
15. ¿Qué vista de Madrid le hace olvidar el mar?
Dónde se acaba la ciudad y empieza la sierra. Un campo de trigo con amapolas. Bajo la sombra del Retiro en julio. La de las terrazas llenas. O la de El Pardo.
16. ¿Callos o sushi? Y, ya que estamos, ¿Lucio o DiverXo?
Ambos, pero siempre Lucio. Y cualquier otro sitio sin renombre en el que se coma bien.
17. ¿Cuál es su rasgo más inequívoco de madrileñismo?
El querer escaparse para luego desear volver. Pensar que Madrid es la mejor ciudad del mundo.
18. ¿A quién le alfombraría de claveles la Gran Vía?
A mi abuelo. Él vivió en Madrid cuando era un mozo pero nunca volvió. Algo que me recuerda que debo traerle un fin de semana.
19. ¿Hay vida más allá de la M-30?
Madrid es más que la M-30. De hecho, la ciudad de Madrid se extiende fuera de este anillo. Fuera de los atascos, del ajetreo, las prisas, hay mucho más Madrid. Ay, los pueblos de Madrid son una maravilla.
20. ¿Cuál es el secreto mejor guardado de su Madrid?
Decía Víctor Hugo que le flipaba Biarritz, que no conocía ningún otro lugar más encantador y magnífico que ese. Y que su único temor, era que se pusiera de moda. Lo mismo ocurre con esto. Prefiero seguir manteniendo en la privacidad el que considero el mejor secreto guardado de Madrid. Por si las moscas.
21. ¿Y su último descubrimiento en la capital?
La Casa Sorolla es siempre un descubrimiento. En lo gastronómico, la hamburguesa de Burnout o el torrezno de Tres por Cuatro. Y este sábado, descubrí la reapertura de lo que antes era la Terraza Tayrona, ahora se llama Botánica y creo que le cambiarán el nombre. El nuevo place to be con flamenco y perfecto para un gin-tonic en verano.
22. ¿Qué vez se dejó el corazón en Madrid, como Chavela?
El primer día de confinamiento caminando por la calle hacia el trabajo. Se me cayó el alma a los pies con tanto silencio.
23. Lugar de Madrid en que ha sido más feliz
El de la pregunta más esperada. En Buitrago de Lozoya guardo el momento más inolvidable de mi vida.
«El Madrid de» es una indagación, en forma de cuestionario, sobre la relación personal de vecinos o visitantes de Madrid con la ciudad. Y, quien dice la ciudad, dice del Xanadú al pico de Peñalara: que Madrid, ya lo sabemos, no es tanto un callejero como un estado mental.