Los pueblos de la Comunidad de Madrid con menos de 2.500 habitantes han protagonizado un notable crecimiento demográfico en los últimos años, aumentando su población en un 12% y sumando 7.268 nuevos vecinos. Entre los municipios que lideran esta tendencia están Horcajo de la Sierra (+17,6%), Robledillo de la Jara (+17,5%), Puebla de la Sierra (+13,6%) y Alameda del Valle (+13,6%).
Este avance se atribuye al impacto positivo del Plan de Reequilibrio Territorial y Lucha contra la Despoblación, impulsado por el Gobierno regional hace seis años. Según datos oficiales, no solo han crecido los municipios más pequeños: los de menos de 5.000 habitantes han ganado 14.932 residentes (+10%), y los de menos de 20.000 han registrado aumentos destacados en Villalbilla (+6%), Velilla de San Antonio (+4,5%) y Miraflores de la Sierra (+4,2%).
Madrid frente a la tendencia nacional
Mientras en España la población de municipios con menos de 5.000 habitantes se redujo en 23.594 personas entre 2018 y 2021, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunidad de Madrid ha logrado revertir la tendencia gracias a una estrategia innovadora y enfocada en el desarrollo rural.
La Unión Europea también ha mostrado preocupación por la despoblación, y la comisaria europea Dubravka Suica propuso recientemente la creación de una agencia europea para la demografía que coordine esfuerzos en los Estados miembros y ofrezca herramientas para abordar este desafío común.
Medidas concretas para revitalizar los pueblos madrileños
Entre las iniciativas estrella de Madrid se encuentra el Plan de Embellecimiento, que otorga ayudas para mejorar la estética de los pueblos, junto con la construcción y rehabilitación de viviendas destinadas al alquiler a precios asequibles para jóvenes, fomentando así su asentamiento en zonas rurales.
Además, se han implementado deducciones fiscales para quienes compren o alquilen su vivienda habitual en municipios con menos de 2.500 habitantes. También destacan las subvenciones para la creación y el mantenimiento de negocios en hostelería y comercio rural, claves para dinamizar la economía local.
El Ejecutivo regional ha apostado por acercar servicios básicos a los ciudadanos mediante iniciativas como la Oficina Móvil de Atención al Ciudadano y la Oficina de Banca Móvil, que incrementarán su frecuencia de paso en los municipios sin sucursales bancarias. Estas medidas buscan evitar desplazamientos innecesarios y garantizar el acceso a servicios esenciales.
Cuidar a los mayores y fomentar la movilidad
Otro pilar del plan es el Proyecto Cuídame, una red de cuidados de proximidad que ofrece atención integral a los mayores, permitiéndoles permanecer en sus pueblos con calidad de vida. Asimismo, el servicio de transporte a demanda se extenderá a nuevas zonas, y el Empleabus continuará acercando la gestión laboral a las localidades rurales.
Para garantizar el desarrollo a largo plazo, se ha reforzado la formación en competencias digitales y tecnológicas, clave para modernizar las actividades económicas en el entorno rural.
Un modelo a seguir en Europa
La Comunidad de Madrid demuestra que, con una estrategia integral y comprometida, es posible revitalizar las zonas rurales y convertirlas en lugares prósperos y atractivos para vivir. Mientras Bruselas trabaja en su propuesta de crear una agencia europea para la demografía, Madrid ya es un referente de cómo frenar la despoblación y construir un futuro sostenible en sus pueblos.