La Torre 4 del Hospital Infanta Sofía, en San Sebastián de los Reyes, comenzará a funcionar a lo largo del segundo trimestre de 2024, con una ampliación de 6.000 metros cuadrados de las instalaciones que albergarán las consultas externas de oncohematología y su correspondiente hospital de día y un incremento de casi 60 camas de hospitalización.
El Gobierno regional ha invertido nueve millones de euros en estas obras de ampliación y acondicionamiento de cuatro plantas en este centro hospitalario que atiende a una población que supera los 340.000 habitantes.
«La población ha aumentado y aparte dentro también de nuestro plan estratégico de mejora de infraestructuras y renovación tecnológica es un área que va a tener un área específica para hospital oncológico y un área de oncohematología, aparte de aumentar la hospitalización tan necesaria y de crear espacios también para el cuidado y el descanso de familiares y padres», ha explicado la consejera de Sanidad, Fátima Matute, durante su visita al centro.
En concreto, esta dotación albergará las consultas externas de oncohematología y su correspondiente hospital de día, que dispondrá de más de 40 plazas. Habrá, igualmente, tres áreas de Enfermería para extracciones y otro tipo de técnicas; ocho de oncología, dos de hematología, una de farmacia y una sala blanca (con el máximo nivel de bioseguridad para evitar la contaminación), nutricionista, psicólogo, así como salas polivalentes.
Siete plantas
«Va a haber dos plantas de hospitalización, una de ellas con un flujo determinado para pacientes más sensibles como son los oncológicos, y luego en la parte de arriba va a haber un área para esparcimiento de pacientes y de familiares», ha detallado la titular de Sanidad.
De esto modo, la planta quinta de la Torre 4 acogerá un dispositivo de hospitalización convencional, con 30 habitaciones individuales, con capacidad para duplicar su uso y poder atender requerimientos específicos para las necesidades de los usuarios (como casos de aislamiento), además de camas para cuidados paliativos.
Además, en la sexta planta se habilitarán otras 28, con la misma configuración que las 30 mencionadas y una zona específica para pacientes geriátricos y de otras especialidades que requieran recuperación funcional.
«Son espacios luminosos en el que se prima el confort de los pacientes, de los familiares y también de los profesionales que tienen que estar aquí trabajando al día a día, enfrentándose a situaciones complicadas. Y va a tener un diseño amigable que es parte también de ese tratamiento y del cuidado que queremos tener», ha indicado Matute.
Finalmente, en la séptima o sobrecubierta se construirá un espacio al aire libre, acondicionado como área de esparcimiento que podrán compartir enfermos y familiares.
