El Ayuntamiento de Colmenar Viejo ha anunciado la transformación del edificio de la Piscina Cubierta del Lorenzo Rico en un Centro Deportivo Integral en el que además de la piscina habrá gimnasio, aulas para clases colectivas y todos los servicios que se reúnen en instalaciones de estas características.
“Hemos trabajado durante más de un año para que la renovación de los contratos con que se gestionan estos servicios deportivos no fuese solo sobre lo existente, sino que incorporase este proyecto de reforma del Lorenzo Rico, sin precedentes, con el que tratamos de destinar el máximo de las instalaciones existentes para dedicarlas al uso deportivo. Tenemos una zona de cafetería de más de 300 metros cuadrados y una zona de oficinas municipales que, con su conversión en espacios deportivos, van a convertirse en una sala de más de 550 metros para entrenamientos, musculación, CrossFit o estiramientos; pero también va a haber una nueva zona desde la que se van a ver las actividades que se producen en el agua, o nuevas salas para clases colectivas, ciclo indoor… todo un centro deportivo integral como, por ejemplo, tenemos en Santa Teresa”, ha explicado el concejal de Deporte, Jorge Domínguez Jiménez.
12 meses de transformación
En los primeros 12 meses, desde que entre en funcionamiento el nuevo contrato, el adjudicatario acometerá las inversiones previstas en el proyecto, que para el edificio de la Piscina Cubierta consisten en la construcción de un nuevo hall de acceso al edificio, de mayor tamaño para poder atender las necesidades de la nueva naturaleza que va a tener la instalación; la reforma integral de los vestuarios y dotación de todo el mobiliario y equipamiento necesario y la reforma de toda la primera planta del edificio para crear una gran sala de musculación, entrenamiento, estiramientos y crossfit de más de 550 metros cuadrados, una sala de padres, córner de cafetería o vending y oficinas.
La licitación incluye precios públicos que garantizarán la accesibilidad a estos servicios, con unos rangos similares a los que tiene en la actualidad la instalación de Santa Teresa de Ávila y tiene como base la figura del abonado, si bien mantiene toda la oferta de bonos de baño, cursillos, etc. de la piscina.
