La Comunidad de Madrid prorrogará hasta el 9 de abril el toque de queda desde las 23 horas hasta las 6 horas y la prohibición de reuniones de no convivientes en domicilios, ya que el 80% de los contagios del Covid-19 se producen en el ámbito familiar y domiciliario.
Según ha avanzado el viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero, el decreto que se publicará mañana en el BOCM prorrogará hasta el 9 de abril la prohibición de reuniones de no convivientes en domicilios, salvo que se trate de cuidados a terceras personas (mayores, dependientes, menores de edad o personas vulnerables).
También se mantiene en la región, hasta el 9 de abril, la limitación de movilidad nocturna con el toque de queda desde las 23 horas hasta las 6 horas, y el horario de cierre del sector de la hostelería y de la restauración a las 23 horas, quedando prohibida la entrada de nuevos comensales después de las 22 horas.
Igualmente, sigue vigente el máximo de seis personas por mesa en las terrazas de los bares y restaurantes, y un máximo de cuatro comensales en el interior de los establecimientos. Asimismo, permanece la obligatoriedad del uso de mascarilla de forma continuada, tanto en el interior como en la terraza, excepto en el momento concreto de la ingesta de bebida o comida.
Continúa la tendencia descendente de contagios
Zapatero ha señalado que continúa la tendencia descendente en todos los indicadores analizados, y que en la última semana cerrada, del 1 al 7 de marzo, se observa una reducción en el número de casos del 13% en relación con la semana anterior, y del 31% comparado con el dato de hace 15 días.
También se sigue produciendo un descenso continuado en la incidencia acumulada a 14 días por cada 100.000 habitantes, que se sitúa a día de hoy en 224, 21 puntos menos que hace una semana, cuando se encontraba en 245; mientras que la acumulada a 7 días, que también baja, está en 107.
A nivel asistencial, la cifra de pacientes atendidos en los hospitales, Atención Primaria y 112 «sigue bajando», con un total de 2.067 pacientes ingresados, de los cuales 1.612 están en planta y 455 en la UCI, de manera que hay 196 hospitalizados menos que la semana pasada, y 60 menos en lo que respecta a la UCI.
Los nuevos ingresos siguen en descenso y ya han bajado más de la mitad desde febrero hasta ahora, pasando de los 2.899 acumulados en la primera semana de febrero a los 1.154 registrados esta semana.
No obstante, Zapatero ha señalado que no hay que olvidar que «el virus sigue aquí», y que de la «responsibilidad y sensatez» de cada uno depende «continuar en esta senda de mejora constante».
