CCOO tiene constancia de 110 propuestas de supresión de aulas para el curso que viene, cifra que podría aumentar
MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) –
La Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid ha suprimido un grupo de 4 años de un colegio público para aumentar al máximo la ratio de las clases restantes el próximo curso, de manera que de haber entre 16 y 20 alumnos por aula pasará a haber 25 alumnos, en pleno debate sobre cómo garantizar la distancia social en los centros educativos de cara a retomar la actividad educativa presencial en septiembre ante el riesgo de un rebrote de la epidemia de coronavirus.
Los padres de alumnos del nivel de 3 años de un colegio de Arganzuela han recibido una circular, a la que ha tenido acceso Europa Press, que indica que, debido a la supresión de un aula del nivel de 4 años «por parte de la Administración», el centro se ha visto obligado a disolver un grupo de los cuatro existentes este curso, por lo que dividirá ese grupo, el menos numeroso, integrado por 16 alumnos, entre los tres restantes.
La decisión estaba tomada antes del Covid-19, ya que una vez iniciado el curso 2019-2020 se comunicó al centro desde la DAT Madrid Capital la decisión de la supresión en ese momento, ante la cual el equipo directivo expresó su desacuerdo alegando las razones que consideró oportunas y consiguió que no se llevara a cabo.
Igualmente, con anterioridad a la pandemia se informó de que para el curso 2020-2021 se iba a llevar a cabo la supresión y al comenzar las matriculaciones este martes, al no haber recibido ninguna instrucción revocando esa decisión, el centro ha informado a las familias de la situación, que, asegura, «hoy por hoy está dentro de la legalidad».
En declaraciones a Europa Press, desde la Consejería de Educación y Juventud han señalado que la ratio es de 25 alumnos por clase, al tiempo que han asegurado que se trata de «un caso concreto, pero no responde a un criterio organizativo general cara al curso del próximo año». «Lo que vayamos a hacer de cara al curso que viene es lo que estamos trabajando ahora viendo la evolución en los próximos meses», han agregado.
Las familias no entienden que el curso pasado se aprobara esa unidad para quitarla al siguiente coincidiendo además con una pandemia. Asimismo, subrayan que todos los años llegan niños nuevos al centro desde el Servicio de Apoyo a la Escolarización (SAE) y las clases de 25 pasan a ser de 26, 27 o 28 alumnos pese a ser un colegio con aulas vacías.
110 PROPUESTAS DE SUPRESIÓN DE AULAS
Por su parte, CC.OO. ha informado a Europa Press de que están analizando la oferta educativa y que tienen recogidas por el momento 110 unidades que se propone suprimir, «pero esta cifra se podría superar», ha advertido la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid, Isabel Galvín .
«Han abordado el proceso de escolarización desde la Consejería de Educación con los planes que tenían previos a la pandemia que estamos viviendo, no tiene en cuenta esta oferta la situación a la que nos está llevando y nos va a llevar la pandemia», ha constato Galvín, quien ha recalcado que «los planes eran recortar en educación».
«Es muy relevante tener en cuenta la supresión de unidades en Madrid capital, una ciudad que está especialmente necesitada de escuela pública. Y principalmente el cierre de unidades se hace en barrios donde se está demandando escuela pública, donde hay institutos pendientes de construir, que se están construyendo por fases y las fases llegan con retraso, no se han terminado las construcciones o incluso no se ha aprobado todavía la construcción, o en otras localidades como Getafe, que es una localidad especialmente afectada por el recorte de unidades», ha precisado.
«Este recorte se produce en una ciudad como Getafe que tiene una de las situaciones más graves en cuanto a la construcción por fases, porque solo en Getafe tenemos recogida el cierre de varias unidades particularmente en Educación Infantil», ha recalcado Galvín, quien ha indicado que la zona norte es otra de las más afectadas en localidades «donde se está demandando escuela pública y donde hay altas ratio».
A juicio de Galvín, «esto forma parte de un proceso que ya venía ocurriendo en el que se suprimen unidades en educación infantil y en educación secundaria obligatoria», y ha apuntado que según los datos oficiales del Ministerio de Educación, desde 2011, «que es el año clave de la crisis», en Educación Infantil el crecimiento de la privada «ha triplicado» al de la pública, en primaria la privada ha crecido en todas sus unidades un 10 por ciento más en relación con la escuela pública y respecto a la secundaria la pública ha bajado mientras la privada ha aumentado la oferta por encima del 32 por ciento, según datos de CC.OO.
BAJAR RATIOS Y MULTIPLICAR OFERTA
Tras señalar la necesidad de «bajar ratios» y «multiplicar la oferta», para garantizar unas «condiciones de seguridad», Galvín ha recalcado que hacen falta «más unidades» y «espacios físicos, es decir, que se terminen de construir los centros que no se han terminado de construir y que se inicie construcción de centros donde no se ha iniciado», así como «que la Consejería de Educación esté trabajando ya con otras administraciones incluso para encontrar espacios donde se puedan producir los procesos de enseñanza aprendizaje con las garantías de seguridad y de higiene que se están recomendando».
«Por el contrario lo que se hace es una oferta de escolarización que olvida que estamos en una pandemia, que esta situación va a durar hasta que no haya una vacuna y que no es previsible que se produzca, en el mejor de los casos, antes de mediados del curso 20/21», ha lamentado.
CC.OO. ha anunciado que presentará «reclamaciones caso por caso y centro por centro» y ha instado a la Consejería de Educación a «empezar a trabajar» para poder responder a las necesidades del curso que viene y si no lo hace impulsará una «mesa de la sociedad civil por la reconstrucción de la educación en Madrid», y ha advertido de que no están dispuestos a «tolerar que de nuevo los recortes sean a la educación pública».
DENUNCIA DE UGT
De su lado, UGT ha puesto de manifiesto en un comunicado que tiene «constancia» de que desde la Consejería de Educación y Juventud se han dado instrucciones a algunos centros para la supresión de unidades en grupos de Educación Infantil que ya están escolarizados en el centro.
«Esto supone, que, lejos de bajar las ratios en Educación Infantil para cumplir las recomendaciones de Sanidad en cuanto a respetar la distancia de seguridad de dos metros, el curso próximo aumentar el número de alumnos por aula en alguno de ellos, obligando a los directores a repartir al alumnado de los grupos que suprimen entre el resto de grupos del mismo nivel», ha explicado.
«Es un atentado a la salud pública del alumnado, de sus familias y del profesorado que trabaja en esta etapa educativa», ha sentenciado UGT, al tiempo que recalca que mientras desde el sindicato y los profesionales en Educación se realizan propuestas sobre reducir las ratios a 15 alumnos máximo si no hubiera una vacuna, la Consejería de Educación y Juventud de la Comunidad de Madrid «saca la tijera y da órdenes de recortar las unidades, lo que va a suponer para el curso que viene, un aumento exponencial de la ratio por aula».
Para UGT, «es evidente que esta Consejería no tiene un plan bien definido de regreso a las aulas», y ha señalado que «la prioridad máxima ahora es establecer un protocolo de seguridad específico para cada etapa o tipología de centros educativos». Además, ha exigido «una rectificación» y que se lleve a cabo una disminución de las ratios en todos los niveles educativos para el curso 2020-21.