MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) –
La Asamblea de Madrid ha reprobado este jueves, con los votos a favor de PP, Cs y Vox, la actuación política del delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, José Manuel Franco, por su gestión de la crisis del Covid-19 y al que acusan de «dejación de funciones».
En concreto, se trata de una Proposición No de Ley (PNL) del PP, apoyada por Cs y Vox y en la que se han posicionado en contra PSOE, Unidas Podemos y Más Madrid. Con ella instan al Gobierno regional a que se dirija al Gobierno de la nación para solicitar su «cese inmediato».
Durante el debate parlamentario de esta iniciativa, el portavoz del PP, Alfonso Serrano, ha señalado que Franco ha hecho «una clara dejación de funciones», haciendo «oídos sordos con la OMS» cuando le alertaron sobre el Covid pero prefirieron «que nada interfiriera en su agenda política».
«El delegado durante esta crisis no ha hecho caso a ninguna de las llamadas del Gobierno de la Comunidad cuando le pedíamos medios de protección civil o para policías locales. Si el delegado del Gobierno hubiera sido la mitad de diligente que cuando decidió investigar a Ayuso y sanitarios por el Hospital de Ifema entonces hubiéramos podido hablar de otros resultados», ha criticado.
A su juicio, lo que ha primado el delegado del Gobierno durante esta pandemia es «su carácter de secretario general del PSOE-M durante estos meses». «Mientras este Gobierno trataba de traer material y los sanitarios se jugaban la vida, ustedes buscaban cómo retorcer el dolor de las familias de las residencias. Por salud democrática, dimita o que le cesen», le ha lanzado.
ACTITUD «REPROBABLE», DICE VOX
Por su parte, el diputado de Vox Pablo Gutiérrez de Cabiedes ha coincidido en que Franco ha tenido una actitud «plenamente reprobable» sin actuar «con anticipación» y ha afeado al Gobierno de la nación que hayan negado el reconocimiento de la existencia «real» de los fallecidos por Covid-19.
«Todas las administraciones, no solo el Gobierno central también la Comunidad, no hicieron prácticamente nada hasta el 8M, hasta que pasó el aquelarre, en el momento que se hace una guerra de sexos (…) La avalancha de cadáveres se produjo por la obsesión de un acto», ha lamentado.
A continuación, la parlamentaria de Cs Emy Fernández de Luna ha reconocido que esta pandemia ha puesto «a prueba» el sistema sanitario porque «nunca antes» se habían encontrado con una crisis sanitaria que hubiera «desbordado» su capacidad de gestión.
A su juicio, en el Gobierno central confiaron en el sistema nacional de salud sin abordar «reformas estructurales» pero cree que las instituciones públicas en lo que tienen que estar ahora es en la prevención, en la coordinación y en el refuerzo del sistema para evitar «situaciones tan dramáticas».
«QUIEREN CONFRONTAR Y HACER PROPAGANDA CON EL VIRUS», LAMENTA MÁS MADRID
Por parte de los grupos de izquierda, el portavoz de Unidas Podemos-IU Jacinto Morano ha defendido que en el momento en el que fue convocada la concentración del 8-M no había elementos para suspenderla y lamenta que se quiera reprobar a una persona por «no hacer una cosa que legalmente no se podía hacer».
Para Morano, tratar de atribuir el «triste resultado» de la pandemia a las actuaciones del Gobierno central es «ventajismo político» y deja entrever que quieren tumbar al Gobierno con una PNL que «no viene a cuento en la Asamblea de Madrid.
En su turno de palabra, el diputado de Más Madrid Hugo Martínez Abarca ha reconocido que algunos nombramientos dentro del Gobierno nacional han sido un «error» como el hecho de que Franco sea delegado del Gobierno en Madrid y al mismo tiempo secretario general del partido en Madrid. No obstante, piensa que esta iniciativa es «una bobada» porque lo que a ellos le molesta de verdad es el «feminismo» y utilizan el «8M como excusa».
«Nadie sabía la gravedad del virus. No hay ni un solo informe que avale las mentiras que están contando. Lo único que quieren es confrontar con el Gobierno y hacer propaganda con el virus», ha defendido.
Por último, el parlamentario del PSOE José Cepeda no entiende porque los ‘populares’ llevan esta PNL a la Asamblea de Madrid cuando «no tiene competencias para reprobar a un miembro del Gobierno de España. «Una reprobación para instar al Gobierno de la nación es una marcianada. Es como si yo como senador de los madrileños llevara al senado la reprobación de Ayuso», ha ejemplificado.
Además, les ha echado en cara que cuestionen el trabajo de Franco por permitir la manifestación del 8-M, cuando ese mismo día la Comunidad convocó a «1.200 personas» a unas oposiciones por la mañana «y no hicieron nada». También, ha afeado a Vox que utilice el mismo argumento del PP cuando el 8M celebraron un congreso en Vistalegre.
Esta mañana ya Franco respondió a esta reprobación, indicando que respeta las decisiones que adopten los diferentes partidos que forman parte de la vida política de Madrid. «Cada uno dedica el tiempo en lo que consideran conveniente y necesario. Y desde el respeto les digo que no voy a dedicar ni un solo minuto ni a enredar ni a practicar la deslealtad institucional», manifestó.