‘Salvavidas’ es el primer single del nuevo trabajo de Allende, un joven madrileño de 28 años que tiene unas ganas inmensas, más que nunca, de mostrar el mensaje que esconde su música.
Tras dos años de parón, Allende vuelve con energía, ilusión y recuperado de su lesión vocal a los escenarios y nos lo cuenta en La Azotea de Madrid365.
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¿Cuándo fue la primera vez que cogiste una guitarra?
La primera vez que cogí una guitarra fue con 14 años en el momento más inhóspito de mi vida. Me hice un esguince jugando al fútbol y tuve que dejar de jugar. Eso hizo que volviera a estudiar y uno de esos días de estudio, en casa, vi un guitarra y dije «voy a intentarlo». Tengo una familia muy grande y todos tocaban la guitarra, así que yo no iba a ser menos. Y, al final, he sido el único que ha hecho un poco carrera de ello.
Y, ¿tu primera composición?
Mi primera composición también fue con 14 añitos, y estaba inspirada en la chica que me gustaba entonces. De hecho, con mi primera banda ‘Doble o Nada’ la desarrollé.
Cuando vivo algo y lo pienso 24/7, mi cabeza lo saca en canciones. Es más, antes de tener ese concepto de canción y antes de tocar la guitarra, ya había escrito alguna que otra letra. La música me ha gustado e inspirado siempre mucho.
Hagamos un salto: de los 14 a los 26 años… hace dos años que empezaste a preparar este disco, ¿no?
Exactamente. Entre unas cosas y otras, al terminar la gira anterior en 2019 decidí que quería hacer un disco, un LP. Mi intención era sacarlo en 2020 pero entre la pandemia y la lesión vocal tuve que posponerlo a ahora, que es cuando acabo de sacar el primer single.
¿Te ha afectado mucho la lesión?
La lesión vocal me afectó sobre todo psicológicamente porque al final es como cuando un futbolista se lesiona y se fastidia la rodilla y el futuro se vuelve incierto… La parte psicológica sí que tuve que trabajarla; muchas veces me pregunté que por qué hacía esto, que si merecía la pena el esfuerzo de rehabilitarme…
Y, ¿por qué haces “esto”?
No te voy a responder lo típico de “no sé hacer otra cosa” porque sí que sé hacer otra cosa, que es ser profe. Pero creo que estoy en el momento perfecto para apostar por esto: sé que es muy difícil conseguir dedicarse a ello a jornada completa pero me reporta una satisfacción vital brutal. La música de mis canciones es donde desarrollo mi vocación al 100%.
¿Qué sería Allende sin la música?
Allende sin la música sería una frustración a todos los niveles: creo que si no pudiera expresarme artísticamente a través de la música, intentaría hacerlo de otra forma. Intentaría, por ejemplo, representar la belleza acompañando proyectos de otra índole, relacionados con la poesía, la pintura… Pero al fin y al cabo Allende es rock y si no estuviera en este proyecto pues estaría con otras bandas, como guitarrista, o llevándolas.
¿Te gustaría representar a grupos?
Siempre me ha picado la curiosidad de por qué compongo canciones para otros más rápido que para mí. Las tres veces contadas que lo he hecho lo he disfrutado mucho, así que sí que me gustaría hacer algo con o para otro grupos, pero de momento creo que soy yo el que tiene que aprender de los demás.
¿Quiénes son tus referentes?
Mi abanico es enorme: en España, a un nivel exagerado, sin duda, Joaquín Sabina. En actitud, Andrés Calamaro me ha llamado siempre la atención y me parece el loco de mi vida. Y, a nivel de trayectoria, creo que hay gente que está haciendo cosas buenísimas: admiro muchísimo a Santi Balmes, Love of Lesbian...
A nivel internacional, mis referentes son nuestros padres: los Rollin’ y nuestras madres: todas aquellas que están en ese plano femenino como Amy Winehouse, Aretha Franklin, Janis Joplin… Mujeres que pase lo que pase no vamos a dejar de escuchar.
¿Qué colaboraciones te gustaría hacer?
Muchísimas (risas). La que me haría una ilusión extrema es con Fito Cabrales, a nivel simpatía es un diez y es de las bandas que tiene el sonido más definido. Poder meter mi granito de arena en una canción suya sería un sueño.
También me encantaría hacer algo con Repion, son amigas mías y las admiro muchísimo, en especial a mi amiga Marina.
¿La próxima gira?
Empezaremos antes de verano. Haremos un par de fechas aquí en Madrid que todavía no puedo decir y dejaremos que corra todo el verano para que la gente pueda escuchar y disfrutar el disco esos mesecillos y, a partir de octubre, empezaremos a movernos más.
Pase lo que pase el esfuerzo económico y personal va a ser sobresaliente así que no me lo quiero pensar mucho, si me puedo ir con la banda a muchos lugares genial pero si me tengo que ir solo, me iré con mi guitarra sin ningún problema.
Y, ¿festivales?
Me fliparía un Sonorama pero eso no depende de mí, depende de la repercusión que tenga mi música. Sería otro sueño.
¿Cómo de importantes son para ti las redes sociales?
Las redes sociales son mi escaparate, son tan importantes que al final hemos decidido que sea nuestro medio de comunicación a nivel global. Todo lo que quiero decirle y contarle al mundo primero pasa por Instagram.
Utilizo las redes sociales en mi día a día para hacer que Allende llegue a más personas pero en el plano personal creo que las redes sociales están maltratando muchísimo. Es un teatro donde todos somos un personaje secundario absurdo, hay mucha competencia y teatro insano y, sobre todo, para las generaciones que vienen detrás. En el plano personal las redes no reflejan una realidad muy sana.
¿Para cuando una web?
Estoy haciendo una nueva web pero, por ahora, si alguien me quiere seguir, @allendemusica en Instagram, así como en Facebook y en Spotify.
¿Cuál sería tu lugar especial dónde grabarías algo aquí en Madrid?
Mi lugar especial sería la Plaza de Oriente, entre los edificios más cercanos al Teatro Real donde hay un clasismo maravilloso que no va nada conmigo pero es ese contraste el que crea la magia con la luz de la casa de campo.
¿Y esa grabación pa’ cuándo?
Cuando me dejen (risas). El otro día hicimos una sesión de fotos con Raquel Linde por ahí y algo haremos seguro.
¿Qué significa para ti tu Salvavidas?
Mi Salvavidas es mi intensidad diaria que me hace vivir las cosas de una forma muy sentida, tanto las cosas buenas como malas. Las cosas con intensidad se disfrutan muchísimo más.
¿Y si tuvieses que personificar a tu Salvavidas?
Uff…Mi salvavidas es el futuro oyente que escuchando Allende se emocionará y querrá bailar mis canciones. Ese va a ser mi salvavidas porque tras estos dos años en la sombra sé que mi salvavidas es esa persona deseosa de rock.
