Ganas de pasárselo bien. Esa es la única premisa y requisito para asistir a WAH. Desde el momento en que cruzas la puerta y recorres ese pasillo oscuro, iluminado apenas por luces parpadeantes, los susurros de ‘save the music, save the music…’ te envuelven. Es imposible ignorar que estás entrando en un universo propio, donde la música y el espectáculo son las leyes que lo rigen.
Es difícil mantener la energía arriba cuando un show dura cinco horas, pero WAH logra algo extraordinario: consigue no solo mantenerte enganchado, sino que te hace querer más.
@madrid365_es Adéntrate en el universo de #WAH un increíble #espectáculo musical y gastronómico de 5 horas de duración que no deja indiferente a ninguno de sus asistentes. #Madrid #IFEMA ♬ sonido original – Madrid 365
Una fusión de comida, espectáculo, música y fiesta
El espectáculo está pensado en tres actos, cada uno con su propia identidad. El inicio, en el food hall, es una invitación a calentar motores. Este espacio, diseñado como una feria gastronómica y cultural, es un banquete para los sentidos: un pasillo lleno de espejos, un fotomatón caracterizado, catrinas gigantes, vans customizadas y neones iluminados por todos lados. Pero lo importante aquí es la comida (y la bebida): distintas variedades de sushi, tacos al más puro estilo mexicano o jamón serrano de calidad hacen que esta etapa sea una experiencia culinaria memorable. Puede que con unos precios algo elevados, sí, pero cada bocado merece la pena. Mientras tanto, por los pasillos se suceden distintos shows espontáneos que van preparando a los espectados para lo que vendrá después.
Con la barriga llena -y el corazón contento- toca dirigirse al segundo acto, el corazón de la experiencia: el espectáculo en sí. La carpa principal se transforma en un templo para la música. Desde el arranque con Sweet Child O’ Mine en una impresionante fusión con ópera, sabes que estás ante algo diferente. Lo que sigue es un despliegue de géneros musicales que te lleva de una emoción a otra sin tiempo para respirar. La fuerza de temas como Bad Romance de Lady Gaga, New York, New York de Alicia Keys o Halo de Beyoncé demuestran el talento vocal de los artistas, capaces de manejar cualquier género con maestría.
Entre las actuaciones más memorables, está el pianista acompañado de una bailarina de ballet, una combinación etérea que añade un respiro emotivo al espectáculo. Pero WAH no se detiene ahí: el despliegue de poder vocal continúa con un impresionante Shallow de Lady Gaga y un Purple Rain que eriza la piel a todo el que esté allí presente. También hubo un homenaje a Michael Jackson con Baby What You Want Me to Do y un explosivo Titanium, que demostró una vez más que los artistas de WAH son puro talento.
El viaje musical no sería completo sin un toque de flamenco. Con una interpretación desgarradora de Que nadie me vaya a llorar y un bailaor que, junto a una caja flamenca, desató la pasión de la sala, WAH mostró su capacidad para fusionar culturas y emociones. Desde la soprano, que impresionó con su rango vocal, hasta un cierre con ritmos de house y techno comercial, el espectáculo abarcó un espectro musical asombroso.
Finalmente, el cierre en la gran capilla es la guinda del pastel. Este espacio, con sus luces tenues y su música de fondo, te invita a tomarte una copa, bailar y dejarte llevar por las vibraciones del ambiente. Un cierre pensado para unir a los asistentes y terminar la noche con una nota alta.
Voces y puesta en escena espectaculares, a falta de un argumento más elaborado
¿Es perfecto? Tal vez no. El hilo conductor de la historia podría trabajarse más, ya que la idea de ‘salvar la música’ queda un poco diluida entre tanto impacto visual y sonoro. Sin embargo, esto no resta valor a la experiencia.
Entre los puntos más fuertes están las voces, que son simplemente espectaculares, y el uso de las pantallas para crear ambientes inmersivos que complementan cada canción. La variedad de géneros asegura que haya algo para todos los gustos, desde el flamenco hasta el pop más moderno.
¿A quién va dirigido WAH? La respuesta está al inicio: a cualquiera que tenga ganas de pasárselo bien. Si estás buscando organizar un evento de empresa que combine lo corporativo con la diversión, este es el plan perfecto. ¿Quieres sorprender a tu pareja con una experiencia gastromusical única? WAH es la opción ideal. Si quieres celebrar tu cumpleaños o despedida de soltera de manera original, aquí encontrarás el ambiente perfecto. Y si lo que te apetece es salir de fiesta con tu grupo de amigos a un lugar diferente, WAH tiene todo lo que necesitas para una noche inolvidable.
En definitiva, más que un espectáculo, WAH es un lugar donde sumergirte por cinco horas en un torrente de emociones. Y al final, sales de allí dándote cuenta que, si tú salvas la música, ella también te salva a ti. Consigue tus entradas a través de este enlace.