Cruz Roja atiende a más de 145.000 personas a través de su servicio de teleasistencia, según ha informado la entidad, quien ha apuntado que en época estival, esta prestación ofrece «tranquilidad» a las familias que están separadas de sus seres queridos.
La organización asegura que la teleasistencia constituyó el primer hito de innovación de Cruz Roja, que comenzó a trabajar con ella en la década de los 90, y destaca de ella que «brinda tranquilidad», tanto a quien la utiliza, como a su entorno, por el hecho de estar una persona «conectada y atendida» por un equipo de profesionales las 24 horas, los 365 días del año.
Cruz Roja da también una «respuesta inmediata», al movilizar rápidamente los recursos necesarios; «protección constante», tanto dentro como fuera de casa; «independencia» para permanecer en el hogar y entorno habitual; y «ahorro», al contribuir a reducir los costes económicos y personales que se producen ante los imprevistos de la vida.
Tres modalidades de teleasistencia
Esto lo hace a través de diferentes modalidades de teleasistencia. Así el usuario puede utilizar el servicio Cuidate+, centrado en la prevención y atención a la salud; LoPe, de localización y para fomentar la autonomía; o la clásica teleasistencia en casa o móvil, a través del botón pulsador, smartwatch o smartphones.
Para más información visita la web www.cruzroja.es/principal/web/teleasistencia o llama al teléfono gratuito 900 100 333.
Desde Cruz Roja destacan el avance de este tipo de servicios gracias al avance de las tecnologías, pero también han puesto en valor lo que, han indicado, es la «base» de la teleasistencia: las personas que hay detrás del servicio.
Las personas que forman Cruz Roja
«Además de la atención y activación de las respuestas cuando se produce la emergencia, también ofrecen apoyo emocional, acompañamiento y preocupación por las personas«, ha indicado la entidad.
La coordinadora de este servicio en la Comunidad de Madrid, Tania Oriol, ha explicado que el personal es el «valor añadido fundamental de Cruz Roja» y el motivo por el cual cree que la ONG ha conseguido ser «líder en el mercado privado» y que «las personas quieran estar» con Cruz Roja.
«El tener una medalla, un reloj, un teléfono móvil o cualquier dispositivo que pulses y que alguien te atienda detrás es algo que podemos ofrecer todos pero, la calidad humana del equipo que hay detrás, la cercanía, el resto de las respuestas que podemos complementar, los acompañamientos, las agendas de seguimiento, actividades al aire libre y otras intervenciones es lo que al final nos hace diferentes y lo que enriquece nuestro servicio de teleasistencia», ha destacado Oriol.