El Ayuntamiento de Leganés ha concluido la primera fase de los trabajos de mejora de siete centros educativos públicos, concretamente los relativos a la sustitución de carpinterías y persianas, ha informado en un comunicado.
Estas obras forman parte de un proyecto que afectará a 33 centros educativos públicos de Leganés y que cuenta con un importe superior a los 10 millones de euros. En total, el Ayuntamiento de Leganés sustituirá las ventanas y persianas de estos centros logrando mejorar los colegios, dotarlos de un aspecto nuevo, una climatización mucho más eficaz y una notable reducción de las emisiones lo que contribuye a conseguir un menor consumo energético.
Primera fase
Esta primera fase ha tenido un importe de 1,6 millones de euros y se ha llevado a cabo en los colegios públicos Rosalía de Castro, Víctor Pradera, Pío Baroja, García Lorca, Concepción Arenal, Lope de Vega y Marqués de Leganés.
En esta primera fase se han colocado un total de 2.276,98 metros cuadrados de carpintería oscilobatiente y 211,04 metros cuadrados de carpintería corredera, que se ha instalado en aquellos espacios en los que no era posible instalar ventanas abatibles. Toda la carpintería es de aluminio está lacada en blanco y tiene rotura de puente térmico.
Así, las obras de estos centros comenzaban el pasado 12 de febrero y aunque la fecha de finalización estaba prevista para el 14 de septiembre, la interrupción de las clases provocada por la Covid-19 ha permitido realizarlas sin presencia de los escolares.
«Las mejores condiciones»
El alcalde de Leganés, Santiago Llorente, ha destacado la importancia de estas obras, que permitirá una mejora de los centros educativos públicos del municipio. «Vamos a destinar cerca de 10 millones de euros para mejorar nuestros colegios. Queremos que los centros educativos de Leganés estén en las mejores condiciones y llevamos meses trabajando en estas reformas, que vamos a realizar en varias fases y con las que llegaremos a casi una treintena de centros», ha explicado.
También la concejala de Educación, Virginia Jiménez, ha señalado que se trabaja «para que los centros están cada vez más actualizados porque algunos tienen casi 50 años».
