La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, avanzó ayer por la tarde que suspenderán las clases presenciales en la región hasta el próximo lunes 18 de enero. De este modo, a partir del miércoles, la actividad educativa se realizará de forma telemática, debido al temporal Filomena. «Es necesario arreglar desperfectos y garantizar una vuelta segura a las aulas», ha explicado la presidenta en su cuenta de Twitter.
La decisión de prorrogar la suspensión de la actividad educativa presencial se ha adoptado tras conocer los primeros informes de la Consejería de Educación y Juventud. En ellos se han detallado los desperfectos causados por el paso de la borrasca Filomena. Información que se ha confirmado desde los ayuntamientos, los equipos directivos de los centros educativos y representantes de la educación concertada y privada.
Dificultad de acceso y desperfectos en los centros
Las principales causas para tomar esta decisión han sido la dificultad para garantizar de acceso y transporte a los centros educativos; así como la seguridad en los mismos por los desperfectos causados por la nieve y el hielo acumulados. Además, se ha tenido en cuenta el riesgo de caída de árboles sobre las infraestructuras.
«El temporal ha derribado techos de espacios deportivos y de estructuras ligeras; la caída de árboles ha afectado también a varias instalaciones y el frío de estos días puede dejar dañados los sistemas de calefacción, cañerías, etc. Es preciso, por tanto, inspeccionar los centros durante unos días para garantizar la máxima seguridad», ha indicado el Ejecutivo regional en un comunicado.
Educación a distancia
Así, al igual que ocurrió el lunes, este martes habrá educación a distancia «donde sea posible». Y, «a partir del miércoles, todos los centros docentes de la región impartirán de forma telemática las clases; de acuerdo con la etapa educativa de los alumnos, y según la organización de cada centro».
La medida afectará a los 1.227.165 alumnos de los 3.344 centros educativos de la región, tanto de titularidad pública como privada. En ellos, durante estos días, se procederá a la evaluación de los posibles daños y de su situación a los efectos de una vuelta a las clases presenciales, «para que pueda realizarse con las mayores condiciones de seguridad y evitando todo riesgo».
En este sentido, los centros educativos de la región deberán comunicar a alumnos y familias por los medios de que dispongan esta prórroga de la suspensión de la actividad educativa presencial. Y deberán comunicar que la actividad educativa continuará en su modalidad a distancia.
