El Museo de Bomberos de Madrid reabre sus puertas tras ocho años cerrado

| 09/4/2022 08:00

El Museo de Bomberos de Madrid, que recorre la historia del Cuerpo desde el siglo XVI, ha vuelto a reabrir sus puertas tras permanecer cerrado durante ocho años para ejecutar las obras de renovación integral de las instalaciones y revisión de sus fondos, con una inversión de más de 2,8 millones de euros.

Ha visitado este espacio tras su reapertura el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, para quien «supone una visita obligada por muchísimos motivos». «Se disfruta enormemente paseando por las salas y porque es obligatorio conocer la historia de los Bomberos, cuando los llamaban matafuegos, la esencia de su trabajo consiste sobre todo en salvar vidas», ha expresado.

El museo, ubicado en el Parque 8 del cuerpo situado en Puente de Vallecas, se fundó hace 40 años (en 1982) y muestra cronológicamente, a través de siete áreas; las diferentes etapas por las que ha pasado el cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid; desde el primer Acuerdo sobre Fuegos de 1577 del Consejo de la Villa; a los primeros 24 carpinteros nombrados ‘matafuegos de la Villa’ en 1618; pasando por la constitución del actual cuerpo en 1894 y hasta la actualidad.

 

Las piezas expuestas, de este modo, siguen un orden que permite adquirir una visión de las distintas épocas; sumergiendo al visitante en las distintas etapas históricas de Madrid gracias a la información contenida en los paneles verticales que incluyen ilustraciones; gráficos; mapas explicativos y fotografías. Además, incluye a los propios fondos de una colección que abarca desde vehículos hasta el diverso equipamiento y herramientas para desarrollar históricamente la labor de los bomberos municipales (mangueras, uniformes, cascos, extintores, linternas o comunicaciones).

«Este museo de los bomberos se podría llamar de muchas formas, como el museo de los héroes, de los valientes, del honor. Todo eso se engloba en la denominación de bomberos. Este museo lo representa fielmente. No es el Museo del Prado, pero tiene un valor francamente importante», ha subrayado el regidor.

Visitas guiadas

Desde el viernes 8 de marzo, el Museo de Bomberos queda abierto al público con visitas guiadas a través de un recorrido de en torno a una hora de duración para grupos de hasta 25 personas, con un sistema de reserva previa a través del espacio del museo en la web del Cuerpo de Bomberos en el portal municipal. El museo abre sus puertas durante las mañanas los días laborables y algún festivo de manera excepcional.

Con motivo de la reapertura, Bomberos de Madrid ha programado una agenda de actividades que se desarrollarán hasta el próximo 22 de abril y que incluyen la apertura al público mañana y tarde durante los días laborables del periodo no lectivo de Semana Santa y diferentes encuentros.

También, se dan a conocer aspectos como la importancia que la gimnástica ha tenido para los bomberos, con una zona en la que se recrea el espacio de entrenamiento de cualquier parque. Y fiel al concepto de museo actual, se incorporan también recursos interactivos y recreaciones virtuales centrados en las causas y consecuencias del fuego y en un aspecto fundamental como la prevención.

El museo cuenta con un espacio dedicado al recuerdo de los grandes siniestros (incendios, accidentes aéreos o ferroviarios) acaecidos en la ciudad; en los que la intervención de los bomberos fue decisiva. Y también el recuerdo, a modo de homenaje, para los profesionales de este cuerpo municipal que fallecieron en acto de servicio; así como testimonios de bomberos sobre sus recuerdos y anécdotas en el ejercicio de su profesión.

Más testimonios, pero de épocas pasadas, pueden encontrase en la zona dedicada al ‘Archivo de Bomberos de Madrid’, que ofrece una pequeña muestra de los valiosos documentos que atesora; desde el acta de creación del cuerpo hasta los libros de fuego o de telefonista que recogen la historia de Madrid escrita por los bomberos.

La vida del museo

El Museo de Bomberos se funda en 1982 con material depositado en los viejos almacenes y en los diferentes parques. Ocupaba una superficie de unos 500 metros cuadrados y se exponían cinco vehículos de tracción mecánica; una escala de tracción animal, una bomba de brazal y dos carros auxiliares, además de varias colecciones de diverso material.

Además, en los años siguientes, el museo continuó abierto al público, pero sin aumentar sus fondos. En 1992, se decidió impulsar su desarrollo para llegar a los madrileños y se buscó todo tipo de material que pudiera ser expuesto; además de realizar unas pequeñas obras de acondicionamiento.

Finalmente, en 2014, se inició un gran proyecto de reforma y remodelación para modernizar la instalación y adaptarla a las nuevas formas de exposición museística: talleres, salón de actos, espacios de prevención, equipos interactivos.