El vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, se ha sumado a la preocupación del sector deportivo de la autonomía y ha pedido al Gobierno central que cambie el límite de aforo que establece para los gimnasios en las fases de la desescalada por distancia social.
El dirigente madrileño se ha reunido este martes, en la sede de su Consejería, con este sector que cuenta con más de 1.500 instalaciones y que genera más de 70.000 puestos de trabajo, en su mayoría «empleo joven y de personas preparadas.
«Es un sector que esta preocupado por la evolución de la epidemia, por la desescalada y por cuándo van a poder abrir», ha indicado Aguado, en declaraciones a los medios. Según ha manifestado, le han trasladado que ellos están «preparados», y que han realizado inversiones para garantizar la renovación del aire y para instalar cabinas que pueden ser usadas como vestuarios.
El vicepresidente ha hecho hincapié en que si se quiere recuperar el «día a día» el deporte y la salud tienen que estar «vinculados». «Necesitamos que la sociedad entienda que el deporte va a ser uno de nuestros grandes aliados, que vamos a tener que recuperarnos físicamente y anímicamente de todo el periodo de confinamiento. Está demostrado que el deporte ayuda a mejorar las defensas», ha subrayado.
Como también consejero de Deportes, Aguado ha incidido en que van a apoyar al sector, a seguir trabajando con ellos y, además, se ha comprometido a trasladar sus reivindicaciones a nivel nacional porque «el deporte tiene que tenerse en cuenta a la hora de desescalar».
A su parecer, hay algunas medidas impuestas por el Ejecutivo central que van «en la línea contraria» como la restricción de aforo al 30 por ciento, donde solo puede haber un técnico por usuario. Con ella, tal y como ha expuesto, muchos gimnasios «no van a poder abrir a partir de la fase 1 porque no les compensa».
«Los costes fijos son demasiado altos como para permitirse abrir. Entendemos que no es la solución para la apertura de los gimnasios, entendemos que hay que cambiar la restricción de aforo por una exigencia de distancia social. Hay que ser exigentes con el sector pero no tan exigentes como para hacerles inviables sus negocios», ha declarado.
