La primera electrolinera, o punto de carga de baterías de coches eléctrico, en suelo de la Comunidad de Madrid se instalará a finales de año en Pozuelo de Alarcón, y luego le seguirán dos en la capital, dos en Getafe y una en Móstoles.
Así lo ha anunciado, en una entrevista concedida a Europa Press, la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, Paloma Martín, quien ha apostado por aumentar los puntos de recarga si queremos que haya un verdadero despliegue del vehículo eléctrico en la región, incluyendo la capital.
La consejera ha recordado que ya pusieron en marcha un programa de incentivos para la instalación de estos puntos de carga en particulares, comunidades de vecinos y para la industria. «Pero hemos querido ser ejemplificantes y hemos diseñado una red de puntos de carga propia», ha apuntado, en referencia a estos cinco puntos en suelo público regional que se pondrán en marcha a través de un acuerdo con una empresa para constituir «una red potente en suelos públicos».
Martín también ha aludido al plan Move III para poner a disposición de pymes financiación de vehículos eléctricos y no contaminantes. «Es una medida clave para reducir las emisiones de CO2 porque el sector del transporte es el más contaminante sobre ello», ha apuntado, al tiempo que ha destacado al Metro de Madrid y sus futuras ampliaciones para caminar en este sentido.
Planes del Canal de Isabel II
La titular regional de Medio Ambiente también ha señalado otros planes eficientes y ‘verdes’ que llevará a cabo el Canal de Isabel II hasta el final de la legislatura. Ahí está la construcción de una planta de hidrógeno verde, la mayor planta de estas características en España. «Se hará con energía fotovoltaica y con agua depurada por el Canal. No se consumirán energías fósiles ni agua de los embalses, sino regenerada», ha avanzado.
Martín también ha mencionado las obras públicas puestas en marcha con el Plan Sanea, en colaboración con los municipios, para hacer obras necesarias para el buen abastecimiento de agua a los municipios; y el plan Red para la renovación de 1.200 kilómetros de redes públicas del Canal.
Y por otro lado se mantiene el Proyecto Vigía de seguimiento del coronavirus en aguas residuales del Canal. «Está siendo una herramienta muy importante en esta pandemia. Hemos conseguido financiación de Naciones Unidas para implementarlo en Perú. Va a continuar tal y como está diseñado y cuando la pandemia remita mantendremos una unidad de vigilancia permanente para seguir haciendo un estudio de las aguas residuales para detectar otros virus en el futuro», ha explicado.
